Comprar una vivienda es una decisión importante y es fundamental tener en cuenta todos los gastos asociados para evitar sorpresas. Aquí te detallo los principales desembolsos, además de la hipoteca, que implica la compra de una vivienda en España en 2025:
1. Tasación de la vivienda:
- En qué consiste: Es una valoración oficial del inmueble realizada por un tasador homologado. El banco la solicitará para determinar el importe máximo de la hipoteca.
- Valor aproximado en 2025: El coste puede oscilar entre los 200 € y los 500 €, dependiendo del tamaño y la ubicación de la vivienda. Generalmente, corre a cargo del comprador.
2. Gastos de notaría:
- En qué consiste: Son los honorarios del notario por la elaboración y firma de la escritura pública de compraventa y, en su caso, de la hipoteca.
- Valor aproximado en 2025: Varían en función del precio de la vivienda y de la complejidad de la operación, pero suelen situarse entre el 0,5% y el 1% del precio de compraventa.
3. Gastos de registro de la propiedad:
- En qué consiste: Son los costes asociados a la inscripción de la escritura de compraventa en el Registro de la Propiedad, lo que garantiza la titularidad del nuevo propietario.
- Valor aproximado en 2025: Al igual que los gastos de notaría, dependen del precio de la vivienda y se sitúan aproximadamente entre el 0,1% y el 0,5% del precio de compraventa.
4. Impuestos:
El tipo de impuesto a pagar dependerá de si la vivienda es de obra nueva o de segunda mano:
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Vivienda de obra nueva:
- IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido): Generalmente es del 10% del precio de la vivienda, aunque puede ser del 4% en el caso de viviendas de protección oficial.
- IAJD (Impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados): Su tipo impositivo varía según la comunidad autónoma, pero suele oscilar entre el 0,5% y el 1,5% de la base imponible (que suele ser el precio de compraventa).
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Vivienda de segunda mano:
- ITP (Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales): También depende de la comunidad autónoma y se aplica sobre el precio real de la compraventa. Los tipos suelen estar entre el 6% y el 11%.
En resumen:
Es recomendable contar con ahorros de entre un 10% y un 12% del precio de la vivienda para cubrir todos estos gastos e impuestos asociados a la compraventa. Este porcentaje es una estimación y puede variar ligeramente dependiendo de la comunidad autónoma y las características específicas de la operación.